SOMBRAS DEL VALBANERA
Estrella del Pino Suárez
Para muchos canarios de mi generación y de las anteriores el tema de la emigración ha estado muy presente en nuestras vidas. En los años de penurias hubo que buscar alternativas para salir de la miseria y encontrar una vida mejor. Cuba, “con la danza de los millones y los centenes de oro”, fue el destino elegido para los que tuvieron que dejar su tierra por necesidad. Muchas eran las maravillas que se contaban de esta isla caribeña, como la exuberancia de sus vegas de tabaco, las llanuras extensas con miles de cabezas de ganado, las zafras de la caña de azúcar… También actuó como efecto llamada el retorno de los que progresaron y volvieron ricos a las Islas, los indianos. Sin embargo, no todos pudieron realizar sus sueños. Algunos regresaron igual de pobres y otros se quedaron allá. Lo que sí ha permanecido es la conexión entre Canarias y Cuba.
Este libro habla precisamente de esta conexión. Además, destacamos el valor sentimental que tiene para muchos de los asistentes a la tertulia. Por eso nos animamos a contar la vida y peripecias de nuestros abuelos, padres o hermanos y coincidimos en que su lectura nos resulta familiar, no sólo por el vocabulario que utiliza, sino también por las historias que cuenta. Así empezamos por un misterio del que todavía se habla: el naufragio del Valbanera cerca del puerto de La Habana en 1919. ¿Por qué desembarcaron muchos pasajeros en Santiago, si su destino era La Habana? En él viajaban unos 570 emigrantes canarios y se salvaron sólo los que decidieron quedarse en Santiago, entre ellos Chano y Natividad, padres de Candela, la protagonista. En este caso, el capitán del barco los obliga a hacerlo por el avanzado estado de gestación de Natividad. Observamos cómo esta catástrofe afecta a los protagonistas a ser testigos de la historia y los mantiene unidos por el destino. Constantemente se menciona el naufragio y se recuerda a algunos de los que perecieron en él, como el caso de Valentina, una mujer gomera que viajaba con sus cinco hijos para reunirse con su marido, al que le iba muy bien económicamente. Después de la tragedia el hombre enloqueció y abandonó todos sus negocios. También seguimos la historia de los supervivientes y el vínculo que se establece entre ellos. Tenían la necesidad de estar cerca y no perder el contacto. Un grupo se asentó en Cabaiguán, zona tabacalera en la que se habían instalado anteriormente muchos canarios y ya eran dueños de las tierras que cultivaban. Comentamos la solidaridad que existía con los recién llegados, como los ayudaban desinteresadamente. Les daban una parcela con vivienda y potrero para el ganado y una vaca y yunta de bueyes. Era bastante para comenzar. Mucho fue lo que trabajaron y las dificultades que pasaron para abrirse camino tan lejos de su tierra.
A través de la mirada de la protagonista nos informamos de la situación política y social del país. Comienza con el mandato de Machado; continúa con Batista, cuando fue elegido democráticamente, luego sitúa la etapa de corrupción y crisis, en la que se suceden siete presidentes en cinco años, hasta el golpe militar de Batista. Finalmente en el 58 Batista se fue a Santo Domingo y llegó Fidel Castro. A partir de 1960, fecha en la que Candela se va definitivamente de Cuba, seguimos todas las peripecias de estos paisanos. También nos acercamos a las costumbres de la época y seguimos de cerca el día a día de estos canarios que se marcharon buscando una vida mejor. Destacamos sobre todo el sentimiento de nostalgia por su tierra y la capacidad de transmitir a sus descendientes el amor al terruño.
Emilia Méndez Pérez