CAMINO DE SANTIAGO 2022

CAMIN0 DE SANTIAGO 2022- CAMINO DE MUXÍA Y FINISTERRE

El Camino de Muxía y Finisterre (o Camino de Finisterre) es uno de los muchos Caminos de Santiago que recorren la geografía española. Se trata de una prolongación para los que quieran caminar un poco más desde Santiago de Compostela, llegando hasta Muxía y Finisterre, el punto que se consideraba el  “Fin de la Tierra” hasta el descubrimiento de América. Los peregrinos  acudían a Finisterre después de haber hecho el Camino tradicional (el francés), que parte de Roncesvalles, para quemar sus botas. De hecho, se encuentra en el lugar una representación de la misma, aunque actualmente no dejan hacerlo por la cantidad de botas y ropa que dejaban en el lugar.

El primer día de llegada a Santiago, después de un buen almuerzo, recorrimos los alrededores de la Catedral, su interior y el parque de la Alameda,  donde se encuentra la escultura de las Dos Marías o Las Dos en Punto (las hermanas Maruxa y Coralia), desde donde se puede apreciar también una bonita panorámica de la Catedral, además de otra escultura dedicada al escritor Valle Inclán sentado en un banco. Fue un día de mucho calor.

El Camino de Finisterre recorre lugares muy bonitos por el interior de Galicia hasta la Costa de la Muerte, pero resultó algo duro, pues en algunas etapas hay muchas subidas y asfalto y si además te da el sol y calor, los últimos km se hacen interminables. De todas maneras, compensa los días de sol y lluvia con los momentos vividos, la naturaleza, las vistas, puentes y riachuelos, los grandes helechos cubriendo los bosques, las flores de mundo de diversos colores, los lavaderos que te transportan a otra época y la cantidad de hórreos de distintos tamaños.

Hay momentos de este Camino para recordar con mucha alegría, como cuando llegamos al Puente Maceira y nos topamos con el río Tambre y la presa, donde se puede observar la fuerza  con la que el agua golpea al puente, que une los municipios de Ames y Negreira, además de destacar el conjunto formado por el poblado primitivo, tres viejos molinos, y la capilla de San Blas. Es considerado uno de los pueblos más bonitos de España.

Otros momentos de disfrute fueron por la tarde, después de almorzar, como la visita al mirador de A Curota, desde el cual pudimos contemplar  una amplia perspectiva de las Rías Bajas, destacando la presencia de bateas en la Ría de Arosa , salpicadas entre islas e islotes entre los recortes del litoral y solo empañada la vista   por un poco de calima.

También nos gustó mucho la visita a Padrón,  a la Casa Museo de Rosalía de Castro, donde pudimos ver numerosas fotos de la poetisa, de sus familiares y amigos, recuerdos personales, escritos  y numerosos objetos cotidianos de la Galicia del siglo XIX.  Después caminamos por el paseo fluvial del Espolón (por donde discurre un afluente del Ulla, el Sar), donde se encuentra un monumento a Camilo José Cela como hijo adoptivo más ilustre.

Otro momento muy bonito fue la visita a las cascadas de Ézaro (Ézaro es una aldea del municipio de Dumbría en plena  Costa de la Muerte).  Al inicio del camino a la cascada hay un pequeño puerto deportivo y a través de una pasarela de madera se conecta con la cascada. Es un entorno natural donde las aguas del río Jallas forman una cascada en su desembocadura hacia el Atlántico. Las aguas del río y los macizos que lo rodean lo convierten en un lugar de ensueño, que podría ser más espectacular si la mano del hombre no hubiese intervenido construyendo embalses antes de su desembocadura.

Otra tarde visitamos caminando los municipios de Cee y Corcubión, que están prácticamente pegados. En realidad fuimos bordeando la ría de Cee-Corcubión, muy cerca del hotel donde nos quedábamos.  Fue muy interesante las explicaciones de la guía María sobre la pesca de los diferentes mariscos y cómo conocer a uno gallego del que no lo es. Corcubión es muy bonito, conocida como la “perla“de la Costa de la Muerte. Destacan  sus casas con fachadas de galería acristaladas mirando al mar, sus calles estrechas y la sensación de tranquilidad.

Unos días antes de llegar a Finisterre, nos desviamos  para ir a Muxía.  Ahí almorzamos y nos dieron el certificado de la Muxiana. Fue un día agotador de muchas subidas y asfalto. Por la tarde visitamos la ciudad y su costa, donde se encuentra el Km 0 del Camino de Muxía, junto al monumento que recuerda la tragedia del Prestige y el Santuario de la Virgen de la Barca. Justo cerca  del santuario y al lado de un mar embravecido que ruge en la Costa de la Muerte, se sitúan una serie de piedras de leyenda, entre ellas destaca la “piedra de los riñones”, que tiene esa  forma y se le atribuye propiedades curativas para la espalda  y los riñones, siempre que se pase nueve veces por debajo de ella (Yo creo que alguno-a está todavía atascado en ella).

El último día fue muy bonito, solo empañado por el calor, sobre todo los últimos tres kilómetros antes de llegar al Km 0 y al faro del “Fin de de la Tierra”, que son los hitos del Camino de Finisterre. Ese día caminamos unos 18 km y muchas terminamos para el arrastre. Después de almorzar nos dieron el certificado de la Fisterrana y estuvimos dando un paseo por la zona del puerto y haciendo algunas compras, pues al día siguiente salíamos para Vigo para embarcar hacia Tenerife.

En Vigo estuvimos recorriendo algunas de sus calles y miradores, desde los cuales pudimos apreciar una panorámica de su puerto, edificios como el ayuntamiento, la Ría de Vigo, y sobre todo en el Parador de Baiona, donde almorzamos. Es una fortaleza amurallada frente a la Ría de Vigo en la que se puede contemplar a lo lejos las Islas Cíes. En fin es  un enclave privilegiado con magníficas vistas sobre la tierra y el mar.

Según María, la guía, el Camino hacia Finisterre se le considera la ruta de la Galicia mágica y más primitiva, pues no está tan transitada por los peregrinos. De hecho nos encontramos con muy pocos si lo comparamos con los Caminos anteriores que llevaban a Santiago.

Para finalizar he de decir que han sido unos días de sensaciones únicas, buena convivencia con el grupo, que las cuatro nuevas compañeras se integraron de maravilla, que lo hemos pasado muy bien y sobre todo nos hemos reído un montón. En esto último ha tenido mucho que ver Margarita, a la que le agradezco en nombre del grupo su alegría, sus canciones en diferentes momentos y su estilo a la hora de posar en las fotos.
                                                                                                                   Carmen Nieves Rodríguez

Diferentes momentos del Camino